La facultad de la música: enriquecernos y hacernos mejores
Leticia Varela
Carlos Sánchez, colaboración especial
La música como estandarte, los cimientos que a la postre desembocan en alegrÃa, la felicidad compartida, el aprendizaje profundo, allá hacia donde los misterios del cerebro se entrelazan con las respuestas del corazón.
La maestra, musicóloga, Leticia Varela, recibe en el Festival Cultural Alfonso Ortiz Tirado el Reconocimiento al Maestro Sonorense 2013. Confusión es lo que implica esta distinción, dice la mentora minutos previo al evento.
--¿La música es entonces un recurso toral para la catástrofe que estamos viviendo?
--Absolutamente, y justamente la teorÃa de Novaro abre nuevas posibilidades a la música para caminar en ese sentido, decÃa usted un impacto toral en la humanidad, eso pretendemos hacer impulsando todo esto, que realmente las personas aprendan a escuchar con mayor capacidad, mayor amplitud y riqueza, porque mientras más rico escuchen más funciones tienen en su mente, mientras más capacidades tiene la persona, se sienta con más poder de ser y hacer, creo yo que las personas pueden ser mejores, quizá digan pues no necesariamente pero cuando somos más ricos como personas sà nos volvemos mejores, eso es lo que creo, estoy convencida de esa facultad de la música, de enriquecernos y hacernos mejores.
--Este homenaje que recibe, decÃa hace un momento, le genera confusión, aparte de este sentimiento, ¿le genera satisfacción?
--Me siento muy agradecida, porque es una muestra de afecto y de valoración de algo que creen que ha servido para alguien, y si ha servido en algo mi tarea, mi trabajo, soy la primera en celebrarlo, bendito sea Dios que me puso esto en las manos y me permitió hacerlo, para mà simplemente lo que he hecho en mi vida no ha sido más que, si Dios puso un talento en mi mano, he tratado de hacerlo que fructifique, no enterrarlo en un agujero para cuidarlo, sino que salga y fructifique.