Nostalgia y reflexión en “El cantante de muertos” de Antonio Ramos
Boletín ISC No. 309 / 12 de noviembre / 2011: Año de Eusebio Francisco Kino
El recuerdo de su abuelo tocando en su saxofón piezas tristes para recordar a un hermano muerto, se quedó en la memoria de Antonio Ramos, el autor del libro “El cantante de muertos”.
Esta publicación fue presentada por el autor y por el escritor Josué Becerra, el sábado 12 de noviembre en la celebración del Día Nacional del Libro y de la XII Feria del Libro Hermosillo 2011.
“El cantante de muertos” trata la historia de una familia que a través de varias generaciones le canta a los muertos. El personaje principal es un niño que no puede entender cómo su padre le canta sólo a las personas que mueren y durante el desarrollo de su vida, trata de encontrar las cosas positivas que no tuvieran que ver con el deceso de las personas.
Antonio Ramos recuerda como dato curioso de su infancia, lo que significó ver cómo la sala, espacio donde la gente se reunía para platicar, cuando moría un familiar el lugar de pronto se convertía en un velatorio en el que posaba un ataúd.
“En la cocina, todo era alegría y estaban sirviendo café y pan, el llanto era sólo al momento del entierro, lo que a mí me sorprendió de manera más profunda es ver a mi abuelo con el saxofón, tocando canciones tristes para recordar a mi tío; me pareció un gesto bello despedir a alguien con canciones”, justificó.
Es que en realidad la costumbre de llevarles música a los difuntos es para que ellos digan sus últimas palabras y pidan perdón, por todo lo que no hicieron en vida o dejaron pasar, agregó.
Antonio Ramos, comenzó a escribir cuentos desde la adolescencia, Entró a su primer taller literario a los 19 años , y a los 21, al grupo de escritores de Monterrey El Panteón que lo adoptó. Comenzó a comprender la profesionalización del ejercicio literario al lado de Eduardo Antonio Parra, David Toscana, Higo Valdés, Ramón López Castro y Rubén Soto.
Ha publicado los libros Todos los días atrás (2005), Dejaré esta calle (2006), Necrologías (2007, 2008), Los cazadores de pájaros (2007), y Sola no puedo (2008).
Ha publicado libros de literatura infantil y juvenil y ha sido becario del Centro Mexicano de Escritores, del FONCA Jóvenes Creadores y de la Fundación para las Letras Mexicanas,